Post Destacado

Configurando la Impresión Perfecta de un Libro de Excel

Aunque vivimos en una era digital, a veces todavía es necesario imprimir datos, tablas, gráficos, o información de cualquier tipo que hayamos procesado en Excel. Especialmente si estamos hablando de informes financieros, gráficos estadísticos, o simplemente porque preferiremos analizar la información en formato físico. Sin embargo, Excel es muy flexible y las hojas pueden volverse rápidamente muy extensas, lo que puede complicar las tareas de impresión. A continuación, detallaremos el proceso para configurar y preparar tu libro de Excel para imprimirlo de la mejor manera posible en cada caso. Paso 1: Revisión Preliminar Antes de imprimir, debes revisar cómo quedará el documento una vez impreso. Excel ofrece dos opciones para ello: a. Ve a la pestaña "Archivo", luego elige "Imprimir". Aquí puedes ver cómo se verá tu documento antes de imprimirlo. b.    Utiliza la opción 'Diseño de Página'. Esta perspectiva te dará una vista preliminar de cómo se verá tu libro

El Problema del Año 1900

 



¿Cómo Excel interpreta y opera con horas?

Lo primero que podemos decir al respecto, es que Excel no tiene una serie de relojitos con los cuales suma y resta horas, sino que detrás de esto hay, como sospechas, matemática. De hecho, Excel realiza una traducción de horas hacia y desde números, siendo “hora”, tan solo una forma de expresar dicho número.

Para una fecha dada, Excel lo interpretará como un número con una parte entera y una parte decimal: la parte entera corresponderá al día, y la parte decimal, a la fracción del día, o dicho de otra manera, las horas, minutos y segundos transcurridos de dicho día.

El “inicio de los tiempos” queda determinado en Excel por un valor cero, que ocurre al inicio del año 1900. Esto significa que Excel no puede trabajar con fechas anteriores a dicho año, con lo cual debemos tener recaudos si nos hallamos frente a un caso de estas características. Esto quiere decir que el número cero en Excel se interpreta como una fecha que en realidad no existe, pero que se expresa como el cero de enero de 1900 (0/1/1900). A continuación, el número 1 representa el 1 de enero de ese año, el 30, el 30 de enero de 1900, y así sucesivamente, tal que por ejemplo el número 44608 nos remonta hasta nuestros días y representa la fecha 16/02/2022.

Sin embargo, el “Problema del año 1900” tiene otra implicancia derivada de la ya mencionada, y es que toda operación matemática entre fechas y horas que arroje un número negativo como resultado, no podrá expresarse en forma de fecha por parte de Excel. Si la expectativa hubiera sido que el número “-1” representara “el día anterior” a 0/1/1900, o algo así como 31/12/1899, temo decepcionarte con que esto no ocurrirá.

Vemos un ejemplo: si por ejemplo nos interesara obtener el tiempo transcurrido en horas entre el 10/2/22 a las 15:00 hs y el 11/2/22 a las 9:00 hs, podríamos pretender, lógicamente, restarlos. El resultado que nos interesará deberá estar expresado en horas.

Sin embargo, si dicha resta se realiza en el sentido [anterior] – [posterior] (es decir, que luego de convertidos internamente a números arrojarían un resultado negativo), el resultado menor a cero no podrá expresarse en forma de fecha, y en su lugar mostrará indefinida cantidad de caracteres “#####”.


Ahora que conocemos las causas del problema, ¿qué podemos hacer para evitarlo? Afortunadamente, es sencillo de prever: basta con procurar siempre restar los valores más pequeños a los valores más altos (buscando que el resultado de la diferencia sea un valor positivo), o en caso que resulte inconveniente, expresar esta diferencia en su valor absoluto (sin signo), que en la práctica es equivalente a convertir un valor de cualquier signo a un número positivo. Para convertir un número a su valor absoluto, empleamos ABS: